El cuerpo humano ha evolucionado para ser físicamente activo. En otras palabras, nuestro cuerpo necesita la actividad física para mantenerse sano La mecanización y la tecnología moderna de las últimas décadas han hecho que seamos menos activo físicamente, y esto está repercutiendo en nuestra salud.

La naturaleza de las actividades de ocio de niños y niñas ha cambiado drásticamente en los últimos tiempos. Antes, la infancia dedicaba gran parte de su momento de ocio a practicar juegos activos al aire libre; sin embargo, la aparición de la televisión, de los juegos de ordenador y de internet ha provocado que los niños y niñas dediquen en la actualidad una parte mucho mayor de su tiempo libre a actividades de tipo sedentario. La importancia de la actividad física para la salud social, mental y física en la infancia es indiscutible, y por lo tanto resulta esencial llevar a cabo esfuerzos en todo el mundo con el fin de “reintroducir” la actividad física en la vida de nuestra infancia.

1- DEFINICIONES

Actividad física: se define como un movimiento corporal producido por la acción muscular voluntaria que aumenta el gasto de energía. Se trata de un término amplio que engloba el concepto de “ejercicio” físico.

Ejercicio físico: es un término más específico que implica una actividad física planificada, estructurada y repetitiva realizada con una meta, con frecuencia con el objetivo de mejorar o mantener la condición física de la persona.

2- HITOS EVOLUTIVOS EN LOS TRES PRIMEROS AÑOS DE VIDA

En este período de vida, el niño adquiere las facultades que le facilitan los procesos de aprendizaje y de educación necesarios para la vida adulta. Y el desarrollo motriz es fundamental no solo para el desarrollo físico, sino también para el intelectual y emocional.

El desarrollo psicomotor se produce por un conjunto de causas o factores que podríamos dividir en Internos y externos:

Internos; Se encuentran en la propia condición o esencia de la persona como; el potencial genético, sistema neuroendocrino y el metabolismo.

Externos: Son aquellos que interactúan o se relacionan con el individuo e influyen sobre los factores internos, de manera que entre ambos propician las condiciones para que se produzca el desarrollo.

3- LOS ACONTECIMIENTOS Y LOGROS PSICOMOTORES MÁS IMPORTANTES DE 0-3 AÑOS

Para poder ayudar al niño en su desarrollo, es fundamental situarse en cuáles son los hitos que deben desarrollar según su edad cronológica, esto servirá de referencia, pues la maduración y evolución de cada niño es diferente. 

• La estabilización. El desarrollo postural viene determinado por la progresiva tonificación del tronco y su evolución.
• Sustentación de la cabeza. Que se adquiere hacia el tercer mes.
• Posición sentada. En torno al quinto mes, aunque suele necesitar apoyo
• Posición de pie. A los nueve meses puede sostenerse con algún punto de apoyo, y entre los 12 y los 15 meses ya suelen andar sin apoyarse.
• La Locomoción, Son aquellos que dan lugar a un cambio en la localización relativa del cuerpo respecto a un punto fijo, por lo que se trata de movimientos que producen desplazamientos en el espacio como: reptar, gatear, andar, correr o saltar.
• Manipulación, son los movimientos que se usan para el manejo de los objetos. Desde las cuarenta semanas el niño manipula y explora objetos con mayor precisión.
• Coordinación óculo manual, requiere una coordinación precisa entre la vista y los movimientos de la mano.se define aproximadamente sobre los seis meses cuando comienzan a usar sus manos para coger y agarra objetos. A partir de este momento los bebés podrán realizar tareas más complejas. La coordinación óculo manual seguirá perfeccionándose durante años.

Estos hitos deben ir apareciéndose y superándose en parte, de manera espontánea y natural, pero el adulto tiene que facilitar el ambiente y ofrecer las experiencias necesarias para facilitar su desarrollo.

La Asociación Española de Pediatría, de acuerdo con las recomendaciones institucionales y la evidencia científica, hace constar que: La inactividad física supone un riesgo importante para la salud física y psíquica de cualquier persona. La práctica regular de ejercicio físico en niños y adolescentes ayuda en la prevención y el tratamiento de la obesidad, enfermedades cardiovasculares, alteraciones psicológicas, desmineralización ósea y algunos cánceres.

Para alguna de estas enfermedades es el factor de protección modificable más importante.
En el niño y el adolescente, el ejercicio físico y la práctica de deportes favorece un desarrollo global óptimo, su integración, el fomento de valores positivos y la adquisición de estilos de vida saludables.

“LA PERSONA QUE REGULARMENTE HACE EJERCICO FÍSICO VIVE MÁS Y MEJOR. LA ACTIVIDAD FÍSICA DA SALUD Y ESTÁ AL ALCANCE DE TODOS.”

4- DECÁLOGO SOBRE LA ACTIVIDAD FÍSICA PARA NIÑOS

• Se recomienda la realización de actividad física moderada o
  vigorosa durante un mínimo de 60 minutos diarios, pudiendo repartirse
  en dos o más sesiones, en su mayor parte aeróbica e intercalando
  actividades vigorosas para el fortalecimiento muscular y óseo 3 veces
  por semana.
• No al sedentarismo. Cualquier tipo de actividad cotidiana es mejor que la opción sedentaria. Camina, utiliza la bicicleta y sube por las escaleras. Asegura el tiempo de estudio y de aprendizaje. Limita el tiempo frente
  al televisor y otros aparatos electrónicos.
• Diversión y juego. Son preferibles las actividades en grupo, divertidas y al aire libre.
• Seguridad. El entorno físico debe ser adecuado y sin peligros. Haz caso de las normas de seguridad para la práctica de deporte.
• En cualquier condición de salud. La actividad física adaptada a cada situación, mejora globalmente el estado de salud y la evolución de los niños con enfermedad crónica y discapacidad.
• Cuestión de hábitos. La práctica de ejercicio físico debe ser un hábito saludable desde la infancia. Los hábitos se mantienen fácilmente en el tiempo y se echan de menos cuando faltan.
• Actividad Prioritaria. Incorpora el ejercicio físico entre las actividades diarias de tu hijo. Aprovecha las actividades extraescolares e invierte en su
  salud.
• Da ejemplo. Realiza ejercicio físico y planifica actividades en familia si quieres que tu hijo sea activo.
• Hidratación. Asegura el aporte de líquidos, sobre todo cuando la actividad es intensa y el ambiente caluroso.
• Alimentación variada y Equilibrada. Pilar fundamental para la salud junto con la actividad física

5- ACTIVIDADES DE MOVIMIENTO COTIDIANAS Y LA AUTONOMIA

En el día a día, y a través de acciones que se periten frecuentemente, es dónde los niños crean sus hábitos. Entre ellos está el del ejercicio físico, pero también hay muchas otras acciones cotidianas que mejoran su salud. Es importante, dar la oportunidad al niño de realizar pequeñas responsabilidades, siempre adaptadas a su edad y maduración.

Las claves para involucrar a los niños en las tareas cotidianas tienen que pasar por:

• Enséñales cómo se hace. Todos para aprender necesitamos un ejemplo o modelo a seguir.
• Incorpora las tareas poco a poco.
• Ármate de paciencia. Reconoce siempre su esfuerzo y no le riñas sino lo hace perfecto, irá perfeccionando su técnica a medida que lo practique.
• Utiliza el refuerzo positivo. Premia las cosas que hace bien y reconoce su participación.
• Adapta las responsabilidades a su edad. Si les decimos que haga algo muy complicado para su edad, conseguiremos que se frustre y pierda la confianza en sí mismo.

Para fomentar el movimiento y la autonomía del niño, el adulto tiene que ser facilitador de experiencias y espacios, así como acompañarle en la realización de pequeñas tareas cotidianas. Es importante alternar actividades de reposo con actividades de movimiento

Desde el nacimiento hasta el año, los niños necesitan y dependen del adulto para todo es dónde establecen el vínculo de apego con las personas que les cuidan, pero si es cierto, que hay pequeños gestos que pueden facilitar su camino a la independencia como:

• Ponerle en el suelo sobre una mantita de actividades para que, mediante el movimiento libre desarrolle su tono muscular y sus movimientos.
• Ponerle una ropa cómoda que le permita moverse con facilidad.
• A partir de los 5 meses proporcionarle juegos adecuados y espacios que le permitan explorar. Manipular.
• Favorecer la adquisición de rutinas con horarios de actividad, alimentación, descanso- sueño adecuados a su edad.
• Es importante no forzar posturas para las que aún no están preparados según su madurez, cada niño lleva su ritmo. Evitar sentarles cuándo no lo hacen por sí mismos, mantenerles mucho tiempo sentados en sillas de paseo, tronas o similar, ponerles de pie sin que ellos lo hagan por sí mismos…

Entre 1-2 años, Los niños en esta etapa se encuentran en una etapa fundamentalmente motora, y se produce uno de los hitos más importantes del desarrollo, la adquisición de la marcha. El adulto tiene que ser facilitador de experiencias para que la actividad física esté muy presente en su día a día. Para ello:

• Se favorecerán las actividades al aire libre, en espacios amplios, y si son en casa o espacios cerrados, intentaremos que estén lo más diáfanos posibles, libres de peligros como (esquinas, alturas…etc).
• Es importante dejar hacer al niño, no limitándole en sus acciones y movimientos, y confiando en su capacidad de resolver situaciones y obstáculos. Es muy importante no trasladarles nuestros miedos, evitando vocabulario como: No, ¡cuidado!, despacio…entre otras. Les mostraremos los peligros, pero desde el acompañamiento, para darles seguridad, algo que le va a beneficiar para la realización de sus acciones y actividades el resto de su vida.

Desde los 2 años en adelante, El niño tiene una mayor destreza motora y cada vez va conociendo más sus posibilidades y limitaciones de acción. A partir de los 2 años les podemos dar pequeñas responsabilidades, como. Ordenar juguetes, regar las plantas, tirar cosas a la basura y que realice solo algunas rutinas diarias, como vestirse y desvestirse, comer solo, poner la mesa…

A esta edad, la actividad física que necesitan empieza a compartirse con otros, para poner a prueba sus habilidades. Sus intereses están más ligados a: Juegos de pelota, carreras, montar en moto, bici, y juegos de imaginación y simbólico, jugar a ser.

Para ello, en esta etapa son fundamentales las salidas al aire libre, excursiones, deportes de pelota, natación…

La parte de nuestro cuerpo más sana es la que más se ejercita. – Séneca